Val’Quirico
¿Quién pensaría que el estado más pequeño de México albergaría un pueblo medieval? No es ocurrencia, se trata de un desarrollo inmobiliario localizado en Tlaxcala, cuya fachada te traslada al medievo en pleno siglo XXI: Val’Quirico queda a 24 kilómetros de Puebla y parece una campiña europea.
Aunque no es un pueblo mágico, tiene su encanto y es ideal para aprovechar un paseo en fin de semana.
El nombre significa en español Valle de Quirico, mismo que venera a San Quirico. Los cimientos de este complejo surgen de lo que fue la Ex Hacienda Santa Águeda, cuyo origen se remonta al Porfiriato; en aquel entonces era tierra fértil para la agricultura.
Desde hace cinco años, un grupo de accionistas convirtió el terreno en el proyecto Val’Quirico y transformaron el panorama de los alrededores inspirándose en la Toscana.
El pueblito está divido en barrios: del Centro, de Bosques, Laureles y de Fresnos; en cada uno hay diferentes amenidades de entretenimiento y gastronomía por si cae la familia en un paseo exprés, pero una de las apuestas a largo plazo es el hospedaje y la residencia.
Te toparás con caminos empedrados, muros que simulan antigüedad y mucha vegetación. Presta atención a los pequeños detalles que hacen la magia: herrería en las ventanas, grandes puertas de madera, enredaderas en cada esquina y faroles colgando entre callejones.
El viaje desde la CDMX es de dos horas. Una vez llegando, desquita ese tiempo sentado en el coche con una caminata por el zócalo, un recorrido en bicicleta (las rentan) e incluso con un paseo a caballo: aquí se encuentra el Centro Ecuestre Valquirico, donde ofrecen pensión con caballerizas, ruta en carruaje y eventos ecuestres.
Otra curiosidad de este pueblito es la universidad Del Fabbro, instituto especializado en la industria inmobiliaria; para ingresar al salón de clases debes atravesar una pared escondida entre los libros de su biblioteca.
Además de innumerables puntos fotográficos, también hay aventuras de misterio gracias al Minuto 59 Escape Room en formato Rey Arturo (rally en familia para escapar del dragón) y Time Machine Studios (estudio fotográfico con tema de guerra civil, salón de los veinte y más).
Si ya te hiciste a la idea de tener un departamento aquí, dirígete a La Teta Abundantia (porción de una escultura de bronce recuperada de Italia) y posa tu mano sobre el busto para augurar abundancia y prosperidad.
