Coahuila
Coahuila ofrece una gran cantidad de experiencias turísticas, es el tercer estado más grande del país, se encuentra en la zona norte y limita al este con Nuevo León y al Sur con Zacatecas y San Luis Potosí. En su territorio predomina el desierto, sin embargo también cuenta con hermosas ciénegas, lagunas montañas y bosques.
Su capital, Saltillo tiene una variedad de museos como el Museo Venustiano Carranza, el del Desierto y el de Aves. Al caminar por sus calles descubrirás la belleza de sus construcciones de gran valor tanto histórico como arquitectónico.
Otras importantes regiones del estado son Piedras Negras, Torreón y Monclova.
Coahuila cuenta con siete Pueblos Mágicos en los que podrás disfrutar de la naturaleza y belleza de su territorio.
Cuatro Ciénegas es uno de los atractivos más populares por sus maravillas naturales como la Poza Azul, las Minas de Mármol y las sorprendentes Dunas de Yeso.
Arteaga, la llamada Suiza mexicana gracias a sus paisajes montañosos, es ideal para practicar esquí, paseos a caballo o en bicicleta, así como senderismo.
En Parras de la Fuente podrás pasear por sus viñedos y descubrir sus sitios históricos como el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe.
Sorpréndete con las Dunas de Bilbao en el Pueblo Mágico de Viesca donde también podrás apreciar el trabajo de tejido y bordado de los artesanos de la región.
Tampoco puedes dejar de visitar Candela y sus relajantes aguas termales, conocer la historia del pueblo de Guerrero en la Misión de San Bernardo o Melchor Múzquiz y sus museos y edificios históricos.
Como verás, Coahuila está lleno de lugares que te sorprenderán, prepara bien tu itinerario y disfruta tu viaje.
Historia
Conquista y colonización
El año de 1521 marcó el inicio de la conquista de México con la llegada de miles de inmigrantes españoles, que se dispersaron por toda la Nueva España.
Comisionado por el gobernador de la Nueva Vizcaya y al frente de una partida de soldados, Alberto del Canto fundó la villa de Santiago del Saltillo en 1577. Una década después, ya solo quedaban 20 españoles en Saltillo debido a los constantes ataques de los chichimecas.
A lo que hoy es Monclova, había penetrado en 1583 la trágica expedición de don Luis de Carvajal y de la Cueva, quien a orillas del río levantó un asentamiento con el nombre de Nueva Almadén.
Hasta ese momento el avance colonizador había sido progresivo y sistemático. Sin embargo, la oleada colonizadora se detuvo durante casi un siglo y ni siquiera esta primera fundación, la de Almadén, logró permanecer. Poco después de la llegada de Carvajal a la hoy Monclova, la población quedó abandonada por el constante acoso de los indígenas.
En las siguientes décadas fracasaron no menos de nueve intentos de repoblar el sitio. Abundaban los grupos de indios bárbaros divididos en numerosas parcialidades o rancherías.
Así lo consignaron los cronistas españoles que llegarían más tarde. El más notable de todos los misioneros en el centro y norte de Coahuila fue fray Juan Larios, franciscano de profunda fe, sincero amor apostólico y, sin duda, gran fortaleza física, logró con su catecismo y su devoción lo que no pudieron personajes que usaron la fuerza y las armas: establecer al norte de Monclova las primeras poblaciones de carácter permanente.