Zona Arqueológica de Yaxchilán Chiapas
Es una antigua ciudad de la cultura maya situada en la orilla del Río Usumacinta, en lo que hoy es el municipio de Ocosingo del estado de Chiapas en México.
En el Período Clásico Tardío, Yaxchilán fue uno de los más poderosos estados mayas a lo largo del curso del Usumacinta, con Piedras Negras como su principal rival.
Estilos arquitectónicos en los sitios subordinados en la región del Usumacinta demuestran claras diferencias que marcan un límite claro entre los dos reinos.
Yaxchilán fue un gran centro, importante durante el Período Clásico, y el poder dominante de la zona del Río Usumacinta.
Dominaba sitios más pequeños tales como Bonampak y tuvo una larga rivalidad con Piedras Negras y al menos por un tiempo con Tikal y con Palenque con quien Yaxchilán encaró una guerra en el año 654.
El sitio es especialmente conocido por sus dinteles de piedra esculpidos en buen estado de conservación establecidos por encima de las puertas de las estructuras principales.
Estos dinteles, junto con las estelas erigidas ante los principales edificios, contienen textos jeroglíficos que describen la historia dinástica de la ciudad. No obstante muchas de ellas fueron retiradas y llevadas a Inglaterra.
Historia de Zona Arqueológica de Yaxchilán Chiapas
Yaxchilán tiene sus orígenes en el Período Preclásico. Una gran parte de lo que se conoce de la historia de la ciudad durante el Período Clásico proviene de los textos jeroglíficos hechos por los gobernantes durante el Clásico Tardío, uno de los más importantes es la Escalera Jeroglífica 1.
Algunas inscripciones retrospectivas parecen haber sido utilizadas para reescribir la historia dinástica de Yaxchilán antes de Escudo Jaguar II, que reinó desde 681 a la 742 a petición de Pájaro Jaguar IV. La ciudad-estado, entonces creció a una capital regional y la dinastía duró hasta principios del siglo IX.
Clásico Temprano, Zona Arqueológica de Yaxchilán Chiapas
La historia conocida de Yaxchilán se inicia con la entronización de Yoaat B’alam I (Progenitor Jaguar I), el 23 de julio 359. Fue el fundador de una larga dinastía, a veces descrito como el U Naah Tal Chum Ajaw (el primer señor sentado) y tomó el trono cuando Yaxchilán era todavía un sitio menor.
Las inscripciones jeroglíficas que datan del Clásico Tardío describen una serie de guerras en el Clásico Temprano, entre la ciudad y sus vecinos. K’inich Tatb’u Cráneo I gobernó a principios del siglo V y fue el primero de los gobernantes de Yaxchilán en ser recordado por haber tomado como cautivo de guerra, al gobernante de Bonampak, Pájaro Jaguar (que no debe confundirse con los cuatro gobernantes de Yaxchilán que llevaban el mismo nombre), a los señores de Lakanmtuun y en el 537 al de Calakmul.
La larga duración de la rivalidad con Piedras Negras ya había comenzado por el siglo V como las dos ciudades que luchaban por dominar la ruta comercial del Usumacinta.
El gobernante Cráneo Luna cuyo nombre más que una referencia a la luna, es el deletreo de una palabra maya poco comprendida para Lanza dardos, se acredita con la obtención de una victoria sobre Piedras Negras en el año 460 y con la captura del rey enemigo, conocido solo como Gobernante A.
Fue a mediados del siglo V, que Yaxchilán tuvo contactos formales con la gran ciudad de Tikal. Pájaro Jaguar II, el próximo gobernante de Yaxchilán, capturó un vasallo del rey de Piedras Negras alrededor del 478.
Jaguar Ojo de Nudo I fue un gobernante guerrero que fue recordado por la captura de los nobles de Bonampak, Piedras Negras y en el 508 de la gran ciudad de Tikal. En el 514, Jaguar Ojo de Nudo I fue tomado prisionero por el Gobernante C de Piedras Negras, tal como se representa en el Dintel 12 de esa ciudad, donde se muestra arrodillado ante el gobernante enemigo con sus muñecas atadas.
Su sucesor, K’inich Tatb’u Cráneo II, fue entronizado el 11 de febrero 526. Este gobernante es notable por la serie de dinteles tallados que encargó, incluyendo una lista dinástica que proporciona información sobre los primeros gobernantes de la ciudad. K’inich Tatb’u Cráneo II supervisó un renacimiento de la fortuna de Yaxchilán y capturó señores de Bonampak, Lacantún y, en particular, en el 537 al señor de Calakmul, una de las dos grandes potencias mayas del Período Clásico, así como la exitosa derrota sobre Tikal, la segunda gran potencia.
Poco se sabe de la historia de Yaxchilán a partir 537 al 629, aunque se sabe que cuatro gobernantes reinaron en este período y solo uno puede ser identificado plenamente: Jaguar Ojo de Nudo II es conocido por haber capturado el señor de Lacanjá en 564, uno de los pocos eventos que pueden ser identificados a partir de este período.
Puede ser que la falta de una historia consignado para este largo periodo indica que Yaxchilán había caído bajo el dominio de un vecino más poderoso, como Piedras Negras, Palenque o Toniná, los cuales eran entidades políticas de gran alcance en la Cuenca del Usumacinta en este momento.
Clásico Tardío
En el 629, Pájaro Jaguar III fue entronizado como gobernante de Yaxchilán. Entre el 646 y 647 capturó a un señor de un lugar aún no encontrado de nombre Hix Witz (que significa “Montaña Jaguar”), en alguna parte en el lado norte del Usumacinta. Yaxchilán alcanzó su máxima potencia durante los reinados de Escudo Jaguar II, y su hijo Pájaro Jaguar IV. [21] Escudo Jaguar II fue entronizado en octubre de 681 y gobernó durante más de sesenta años.
Él fue referido a menudo en los textos jeroglíficos como Maestro de Aj Nik, en referencia a la captura de su primer cautivo antes de convertirse en gobernante, esta frase se une a su nombre en 32 ocasiones distintas.
Durante el último tercio de su reinado fue responsable de un programa de construcción monumental que incluye la construcción de edificios magníficos con Dinteles ricamente tallada, Escaleras Jeroglíficas y Estelas talladas, transformando el centro de la ciudad.
Durante su reinado, Yaxchilán se extendió para incluir los sitios cercanos de La Pasadita y El Chicozapote al noroeste de la ciudad. Al mismo tiempo los sitios de Lacanjá y Bonampak parecen haber estado bajo su dominio, aunque esta región estaba controlada por Toninas en el 715.
En el 689, relativamente al comienzo de su reinado, Escudo Jaguar II es recordado por haber capturado Aj Sak Ichiy Pat. En el 713 el capturó a Aj K’an Usja, el ajaw de B’uktunn, en cierto modo un sitio desconocido. En el 726, Yaxchilán fue derrotado por su rival Piedras Negras, un evento descrito en la Estela 8 de Piedras Negras.
Un Sajal (señor subordinado) de Escudo Jaguar II fue capturado como producto de este evento. Es después de este período, más de cuarenta años durante el reinado de Escudo Jaguar II, que este se embarcó en su impresionante programa de construcción, esto puede indicar que en este momento Yaxchilán era capaz de ejercer su independencia de la hegemonía de los vecinos una vez potentes y reclamar una mayor independencia política y un control más lucrativo del comercio fluvial.
En el 729, Escudo Jaguar II capturó a Aj Popol Chay, el señor de Lacanjá. Este evento, junto con las otras victorias del reinado de Escudo Jaguar II, se describe tanto en los textos jeroglíficos del Edificio 44 y también en una serie de estelas cerca del Edificio 41. Esta victoria sobre Lacanjá se compara con la victoria anterior del Jaguar Ojo de nudo II en contra de la misma ciudad.
Del mismo modo, la captura de un señor de Hix Witz en el año 732 se compara con la victoria de Pájaro Jaguar III en el mismo sitio.
El 749, Yoaat B’alam II de Yaxchilán asistió a una ceremonia en honor al Gobernante 4 de Piedras Negras. Si Yoaat B’alam II fue gobernante de Yaxchilán en este momento, esto indicaría que era subordinado del gobernante de Piedras Negras.
Este evento se ha grabado en el Panel 3 de Piedras Negras; no hay registros del reinado de Yoaat B’alam II en Yaxchilán, lo que indica que los registros fueron posteriormente destruidos si efectivamente había gobernado allí.
Pasaron diez años hasta la siguiente toma de posesión documentada del sitio, el hijo de Escudo Jaguar II, Pájaro Jaguar IV en el 752, demostró ser uno de los gobernantes más enérgicos del Clásico, creando una profusión de arte y arquitectura públicos durante su reinado de 16 años enfocados a una sola cosa la promoción continua de su propia legitimidad.
Como varios gobernantes mayas, la mística de Pájaro Jaguar IV estaba estrechamente ligada a su imagen de guerrero; sin embargo, la comprensión moderna de los textos muestran el bajo rango de la mayoría de las víctimas.
El siguiente al trono fue Escudo Jaguar III, su fecha de ascensión se desconoce, pero para febrero del 769 ya estaba en el poder.
A principios de 790, Escudo Jaguar III supervisó la instalación de Chan Muwan II en Bonampak, y contrató a los artesanos Yaxchilanos para conmemorar los murales de la Estructura I (con el anterior Chan Muwan).
Poco después del 800 dio comienzo el reinado del último gobernante de Yaxchilán K’inich Tatb’u Cráneo III, su legado se restringe a un conjunto de dinteles dentro del pequeño Edificio 3 y una victoria sobre Piedras Negras.
Sin embargo, estos triunfos fueron inútiles, ya que el orden del clásico estaba agonizando, las evidencias arqueológicas sugieren de un abandono masivo de la ciudad poco después de concluir el Edificio 3, apareciendo simples casas habitación en la innecesaria Gran Plaza e incorporando monumentos rotos como la Estela 24, poniendo fin a un gobierno dinástico y la destrucción de la ciudad como capital.
Historia Moderna
Vista de la Gran Plaza
La primera publicación que menciona el sitio parece haber sido una breve mención del coronel Juan Galindo gobernador del departamento del Peten en 1833 para ser publicado por la Royal Geographical Society. El profesor Edwin Rockstoh del Colegio Nacional de Guatemala visitó en 1881 y publicó otro corto reporte.
Los exploradores Alfred Maudslay y Désiré Charnay llegaron aquí por cuestión de días el uno del otro en 1882, y publicaron reportes más detallados de las ruinas con dibujos y fotografías. El informe de Maudslay fue publicado por la Royal Geographical Society en 1883.
En 1891 Gerónimo López de Llergo realizó un mapa topográfico del sitio abarcando la Gran Plaza y la Gran Acrópolis. Teoberto Maler visitó el lugar en varias ocasiones desde 1897 hasta 1900, con una descripción detallada en dos volúmenes de las ruinas y otros sitios cercanos, fue publicado por el Museo Peabody de la Universidad de Harvard en 1903.
En 1931 Sylvanus Morley dirigió una expedición a cargo del Instituto Carnegie, mapeando el sitio y descubriendo más monumentos.
A partir de 1970, Ian Graham hizo numerosas visitas a Yaxchilán y registró las inscripciones allí. Estas inscripciones se publicaron a partir de 1977 en el Corpus of Maya Hieroglyphic Inscriptions por el Museo Peabody de la Universidad de Harvard.
La mayista Tatiana Proskouriakoff realizó un trabajo pionero sobre el desciframiento de la escritura maya usando las inscripciones de Yaxchilán, publicando en 1963 Historical Data in the Inscriptions of Yaxchilan Vol 1 y 2. Desde entonces Peter Mathews y otros han ampliado sobre sus primeros trabajos.
El Instituto Nacional de Antropología e Historia de México realizó una investigación arqueológica de Yaxchilán entre 1973 y 1985, para la ejecución del proyecto fue designado el arqueólogo Roberto García Moll.
El INAH realizó trabajos de consolidación y conservación de la parte central del sitio a lo largo de más de diez temporadas de investigación, García Moll desarrollo uno de los proyectos más importantes en el área Maya, pionero en la metodología empleada en la conservación y exposición de sus edificios.
Entre 1989 y 1990 los arqueólogos Daniel Juárez Cossío y Mario Pérez Campa continúan con las exploraciones arqueológicas.
Desde 1990 el proyecto La pintura mural prehispánica en México del Instituto de Investigaciones Estéticas de la Universidad Nacional Autónoma de México, se dedica al registro y estudio de los murales precolombinos, como los de Yaxchilán. Al igual que en otros sitios mayas del Período Clásico, Yaxchilán tuvo entre sus manifestaciones plásticas a la pintura mural, solo que en el caso de este sitio, como en el de muchos otros, esta no llegó en buenas condiciones hasta nuestros días por diferentes factores, sobre todo de tipo natural.
Pero, aunque muy deteriorada y fragmentada, está presente desde sus primeras construcciones, como en el caso de la subestructura del Edificio 7 o bien en los Edificios 6, 7, 23, 33, 40, 42 y 44.
El estilo de pintura mural a la que perteneció Yaxchilán está catalogada dentro de la tradición del Usumacinta.
Yaxchilán siempre ha sido de difícil acceso: hasta una época reciente no existían carreteras en un radio de 150 kilómetros. Los únicos accesos eran a mediante un largo viaje en bote o avioneta. Desde la construcción de una carretera limítrofe con Guatemala por el gobierno mexicano en la década de 1990, se ha hecho más accesible a la visita de turistas.
Desde Palenque, se toma la Carretera Fronteriza del Sur, que va a Chancalá, que se desvía hacia Frontera Corozal, lugar cercano a Yaxchilán.
Otra opción es la vía aéra, existiendo servicios de avionetas desde las ciudades de Palenque, Ocosingo y Comitán. Algunos mayas lacandones todavía hacen peregrinaciones a Yaxchilán para llevar a cabo los rituales a los dioses mayas.
Localización
Yaxchilán se encuentra en la orilla sur del Río Usumacinta, en el vértice de un meandro en forma de herradura. Este bucle defiende el sitio en todos los lados excepto por un enfoque estrecho de la tierra desde el sur.
El sitio se encuentra a 40 kilómetros río abajo de las ruinas de Piedras Negras, su principal rival y a 21 kilómetros de las ruinas de Bonampak.
El sitio se encuentra en el municipio de Ocosingo, en el estado de Chiapas, en el lado mexicano de la frontera internacional con Guatemala, que sigue la línea del río. Está a 80 kilómetros río abajo del sitio Maya Altar de Sacrificios.
Localización
Yaxchilán se encuentra en la orilla sur del Río Usumacinta, en el vértice de un meandro en forma de herradura. Este bucle defiende el sitio en todos los lados excepto por un enfoque estrecho de la tierra desde el sur.
El sitio se encuentra a 40 kilómetros río abajo de las ruinas de Piedras Negras, su principal rival y a 21 kilómetros de las ruinas de Bonampak.
El sitio se encuentra en el municipio de Ocosingo, en el estado de Chiapas, en el lado mexicano de la frontera internacional con Guatemala, que sigue la línea del río. Está a 80 kilómetros río abajo del sitio Maya Altar de Sacrificios.