Hidalgo
Hidalgo podría parecer un estado pequeño, sin embargo su historia y tradición son inmensas. Su herencia minera y coloridos pueblos nos ofrecen la imagen de un destino sacado de un cuento de hadas.
Sus territorios naturales entre sierras y montañas lo ha convertido en un referente del turismo de aventura, donde los visitantes pueden practicar escalada, senderismo, pesca y ciclismo de montaña.
Si prefieres algo más relajado, puedes visitar la zona del Valle del Mezquital, que cuenta con varios balnearios y parques acuáticos con aguas termales, perfectos para disfrutar en familia.
Adéntrate en la historia de la región y descubre sus legendarios sitios arqueológicos como Tula, el Pahñú, Huapalcalco y Xihuingo que se considera el vestigio arqueológico más antiguo del estado.
Visita sus tradicionales Pueblos Mágicos y enamórate de sus paisajes, costumbres y tradiciones como Zimapán con su increíble presa y las Grutas de Xájhá. En Tecozautla te sorprenderás con el Géiser y te relajarás en sus aguas termales. Admira los edificios históricos de Huichapan.
En Mineral del Chico te llenarás de adrenalina, ya que se considera como la meca del turismo de aventura. En Real del Monte aprenderás de su pasado minero y finalmente admira los famosos Prismas Basálticos en Huasca de Ocampo.
La comida típica de Hidalgo incluye barbacoa, los tradicionales pastes, molotes y el pulque.
Por su ubicación y cercanía con el centro del país es un destino ideal para visitar un fin de semana.
Historia
Estigios de la prehistoria en Hidalgo han sido hallados en las regiones de Tepeapulco, Tulancingo, Actopan y Huichapan; su antigüedad oscila entre los 14 000 y los 2500 a.C.
Es en Huapalcalco en el municipio de Tulancingo, donde los restos más antiguos de vestigios humanos en territorio hidalguense se han encontrado.
Los primeros en fundar colonias en estos territorios, fueron grupos olmecas, que aprovecharon los bancos de jade y serpentina.
Durante el Periodo Preclásico se desarrolla la explotación de la obsidiana cobró relieve, como en los yacimientos de la Sierra de las Navajas.
Las primeras evidencias de estratificación social en Hidalgo se han encontrado en La Loma en el municipio de Tepeji del Río de Ocampo.
Durante el Período Clásico los teotihuacanos extendieron su territorio hacia las poblaciones ubicadas en Hidalgo, particularmente a Chingú, localizada entre Atitalaquia y Tlaxcoapan, Pahñú en Tecozautla, Xihuingo en Tepeapulco, Zazacuala en Santiago Tulantepec de Lugo Guerrero y Huapalcalco en Tulancingo de Bravo.
Xihuingo es por donde pasaba una de las rutas de intercambio comercial que iba de la Mesa del Centro hacia el oriente. En el Período Epiclásico la cultura xajay, que se desarrolló aproximadamente, de 450 a 950 d.C., contando con cinco sitios mayores en Hidalgo: Zethé, Pahñú, Zidada, El Cerrito y Taxangú.
Desde Pahñú en el municipio de Tecozautla se observa el cerro de Hualtepec o el Astillero, que de acuerdo con diversas investigaciones, es el mítico Cerro Coatepec lugar donde nació Huitzilopochtli.