Hacienda la loma durango
Historia de Hacienda la loma durango
La Ex Hacienda de La Loma es una edificación protagonista de pasajes importantes en diferentes periodos de la historia de México como en la Revolución Mexicana, pues fue ahí donde se conformó la División del Norte de Francisco Villa el 29 de septiembre de 1913, además antes dio asilo a Benito Juárez durante la segunda intervención francesa en Septiembre de 1864, sin embargo, los episodios históricos no han sido suficientes motivos para impulsar la conservación y mejoramiento del recinto en los últimos años, ante esto, el deterioro avanza.
La razón principal del desinterés de autoridades y los mismos pobladores de La Villa de La Loma, surge debido al problema legal en que se encuentra el terreno, pues existen dos personas que se dicen propietarios, por una parte Juan Villarreal y por otra Gloria Alicia Acosta, quien es hija de Salvador Acosta a quien se le reconoce como último dueño legítimo del recinto.
Pese a este conflicto y gracias al impulso de los propios pobladores a partir de 1989 se abrió al público y posteriormente se creó el Museo General Francisco Villa y la División del Norte, del cual actualmente está a cargo Alberto Antúnez Ramírez, hijo de Alberto Antonio Sillas, quien luego de la muerte de Salvador Acosta se quedó a cargo de la Hacienda y realizó diferentes acciones para impulsar el lugar como un sitio turístico.
Antúnez Ramírez comentó que La Hacienda de La Loma empieza a partir de su culminación total el 15 de abril de 1821, fue mandada a construir por el empresario minero Juan José Zambrano.
El edificio abarca dos mil 100 metros cuadrados, se conforma de 20 habitaciones, comedor, cocina, capilla, sacristía, cuarto de escalera, recibidor, dos cuartos de oficina, dos patios y un sótano.
Aunque es de una sola planta, el edificio impone, desde antes de conocer la historia que encierran sus paredes, pues sus altas bardas, los arcos alrededor de los patios, sus columnas, los techos de madera, la arquitectura de sus habitaciones, dejan maravillados a todo visitante. Sin embargo, el paso del tiempo y la falta de atención, está ocasionando estragos en su infraestructura, como en la puerta principal, de más de 150 años, ahora está siendo sostenida por una viga, debido a que se ha caído parte del marco, aunado al abandono de espacios que deberían estar habilitados.
Alberto Antúnez, habla sobre la situación que ha atravesado la ahora Ex Hacienda de La Loma, desde que murió Salvador Acosta en 1988. “Se mantuvo algún tiempo cerrada y posteriormente los herederos tenían la intención de destruir el lugar y se formó un frente para no permitir que llegarán las máquinas, se dieron cuenta y no mandaron nada”, enfatizó.
El frente que se creó en ese momento, fue quien solicitó que lo cedieran como museo, se hace un protocolo con el Gobierno del Estado de ese entonces, sin embargo, no se pudo definir debido a que había dos dueños y aunque Villarreal aceptó firmar un documento, Gloria Alicia Acosta no lo hizo y el documento quedó incompleto.
Pero el museo se hizo y se abrió al público quedando al frente su padre, en 1990, a partir de ese momento empieza el esfuerzo por la recuperación de la edificación, con apoyo de la compañía Constructora Nacional quienes en ese momento realizaban la autopista Gómez Palacio-Durango.
“Hacen el campamento en La Loma, la intención de ellos era utilizarlo como hotel porque traían mucha gente del sur, a mi papá de buena intención le pareció bien, pero los directivos al conocer la historia, que había estado el presidente Juárez, que ahí se había formado la División del Norte, no les pareció lo correcto y durante tres años le dieron apoyos, se levantaron cuartos caídos, se reinstalaron techos, hasta puertas y ventanas se hicieron” expresó.
Ubicación.
Llegar a la Hacienda La Loma no es difícil. Saliendo de Torreón, vaya rumbo la carretera libre a Durango, pasando por la caseta de León Guzmán, luego La Goma y los Puentes Cuates hasta un entronque, donde se da vuelta a la izquierda, no se preocupe, hay letreros en el camino que le darán indicaciones.