Aguascalientes
Aguascalientes es un estado rico en historia, cultura, tradición y naturaleza, forma parte de la zona del Bajío, colinda al norte con Zacatecas y al sur con Jalisco.
Debe su nombre a los manantiales de aguas termales que se encuentran en la región. Su territorio lo tiene todo para ofrecer una gran variedad de experiencias para todos los gustos..
Desde vivir la fiesta de la Feria de San Marcos, durante los meses de abril y mayo, descubrir su centro histórico con su hermosa catedral de estilo neoclásico toscano, disfrutar de las exposiciones, parques y fuentes del Museo de Aguascalientes, dar un paseo por sus calles y admirar sus coloridas casas hechas de cantera. Hasta hacer un tour por sus viñedos y aprender de la historia de sus haciendas.
Otro imperdible en tu lista de qué hacer en Aguascalientes es visitar sus hermosos Pueblos Mágicos, llenos de atractivos que te robarán el aliento.
Tal es el caso de Calvillo, que se caracteriza por ser uno de los mayores productores de guayaba y su hermoso arte del deshilado. Aquí podrás disfrutar de la Presa de Malpaso, La Plazuela Hidalgo y el Templo del Señor del Salitre.
Real de Asientos es el municipio más antiguo del estado y te sorprenderá con sus paisajes y herencia minera, rodeado de túneles y acueductos te llevará a hacer un viaje por el tiempo. No puedes dejar de visitar la Parroquia de Nuestra Señora de Belém y la Mina el Hundido.
Los amantes de la naturaleza y el ecoturismo encontrarán en San José de Gracia, el lugar ideal para sentir la adrenalina, como en el Parque Aventura Boca de Túnel que cuenta con formaciones rocosas, puentes colgantes y tirolesas, también hay paseos en bici y caballos.
Podrán visitar el campamento de Sierra Fría o admirar el Cristo Roto, que se encuentra en la presa Plutarco Elias Calles, la más grande del estado.
Deléitate con deliciosa gastronomía en las tradicionales cenadurías, donde encontrarás antojitos como flautas, enchiladas estilo Aguascalientes o sopes.
No dejes de probar la birria o las chiquiadas que son unas gorditas fritas con manteca y para ese antojo dulce, prueba alguno de los postres hechos a base de guayaba, que es uno de los principales productos de la zona.
Historia
Tras la llegada de Cortés y la caída de Tenochtitlán en 1521, la conquista llevó a muchos españoles aventureros a avanzar hacia el norte en busca de fortuna.
Estas tierras, además de ser más áridas que las que habían encontrado en Veracruz y en el Valle de México, estaban habitadas por indígenas que en su mayoría eran nómadas y que pronto se convirtieron en el terror de los todavía mal trazados caminos que conectaban a la Nueva España con esta otra parte del territorio, al cual se le dio el nombre de la Nueva Galicia.
Pedro Almíndez Chirino fue el primer español que se internó en este territorio, tal vez a finales de 1530 o principios de 1531, en cumplimiento de instrucciones dadas por Nuño de Guzmán.
Las bélicas tribus chichimecas hicieron el acceso y tránsito por la zona especialmente difícil a los conquistadores.
De hecho, la total ocupación de las tierras del Bajío fue una labor que tardaría alrededor de dos siglos. Al respecto, el Virrey Luis de Velasco ofrecía beneficios municipales a quienes establecieran poblados para hacer frente a los chichimecas; por su parte, el virrey Gastón de Peralta decidió enfrentarlos de forma directa, lo que no le dio buenos resultados