zona del silencio durango
La Zona del Silencio es un cuadrante en la regiòn que une a los estados de Durango, Chihuahua y Coahuila. Atrévete a descubrir este rincón, famoso por sus exageradas leyendas y naturaleza exuberante.
El Bolsón de Mapimí, en donde se ubica este lugar, solía ser un lecho marino. Es por eso que en su suelo, hasta la fecha, se pueden encontrar una gran cantidad de fósiles marinos.
Las historias de fenómenos inexplicables y el asombroso espectáculo de la naturaleza han convertido a la Zona del Silencio en Durango en un auténtico atractivo turístico que tienes que conocer.
Leyendas de la Zona de la Silencio
Desde que un misil de las fuerzas militares de los Estados Unidos cayó en algún lugar del desierto de Durango, la leyenda de la Zona del Silencio ha mutado, cual teléfono descompuesto, hasta alcanzar niveles extravagantes.
Algunos locales alegaron que una fuerza magnética había derribado el misil y, desde entonces, se han propagado las historias de anomalías que interfieren en el funcionamiento de aparatos electrónicos y de telecomunicaciones.
Pero las historias van aún más allá. Algunos han llegado a testificar de la presencia de extraterrestres y hasta mutaciones inexplicables en la flora y fauna de la Zona del Silencio.
Ninguna de ellas ha podido ser comprobada y, hasta donde se sabe, esta zona podría ser como cualquier otro desierto. Es decir, salvo por su extraordinaria naturaleza, no hay nada especial acerca de este lugar.
La Zona del Silencio es un área localizada en la parte central del Bolsón de Mapimí, entre los estados mexicanos de Chihuahua, Coahuila y Durango.
El Bolsón de Mapimí está situado en la parte centro-norte de México, a unos 180 km al noroeste de La Laguna que tiene como ciudades principales a Torreón, Gómez Palacio y Lerdo. Forma parte del Desierto chihuahuense.
La Zona del Silencio se encuentra situada entre Durango, Chihuahua y Coahuila, entre los paralelos 26º y 28º.
Su nombre proviene del mito urbano de que las ondas de radio no pueden ser transmitidas en el lugar de manera normal.
Historia
En julio de 1970, un misil de pruebas Athena RTV lanzado desde una base militar estadounidense cerca de Green River, Utah, en dirección al polígono de WSMR, perdió el control y cayó en esta zona. El cohete transportaba dos pequeños contenedores de cobalto 57, un elemento radiactivo.
Inmediatamente, un equipo de especialistas llegó para buscar el misil.
La búsqueda por tierra y aire duró tres semanas. Cuando finalmente se localizó el cohete, se construyó una carretera para transportar los restos y una pequeña cantidad de tierra contaminada.
Como resultado de las operaciones de rescate de la Fuerza Aérea estadounidense, surgieron varios mitos e historias sobre el área, incluyendo “extrañas anomalías magnéticas que impiden la transmisión por radio”, mutaciones de la flora y fauna o visitas extraterrestres.
Flora y fauna
En la Zona del Silencio también existen áreas con gran concentración de fragmentos de aerolitos, así como especies endémicas, como lo es la tortuga del desierto, reptiles únicos en el mundo y abundantes nopales violáceos.
También se pueden encontrar especies vegetales como la gobernadora, la sabaneta, ocotillos, magueyes y cactáceas, algunas de ellas endémicas.
La fauna incluye liebres y conejos, ratones y ratas canguro, zorros, coyotes y búhos. Al igual que la vegetación, los animales sufren adaptaciones especiales que les permiten vivir en las condiciones adversas de esta árida región.
En 1974 se estableció en la zona una reserva de biosfera, que inició bajo la dirección del Instituto de Ecología, con la participación activa del Gobierno del estado de Durango, CONACYT, INIREB, IPN, SEP, Comités MaB-México y MaB-E. U., la Escuela Normal Superior de París, la Universidad de Arizona, el Musée National d’Histoire Naturelle de París, UNAM y otras organizaciones.